أَنزَلَ مِنَ السَّمَاء مَاء فَسَالَتْ أَوْدِيَةٌ بِقَدَرِهَا فَاحْتَمَلَ السَّيْلُ زَبَدًا رَّابِيًا وَمِمَّا يُوقِدُونَ عَلَيْهِ فِي النَّارِ ابْتِغَاء حِلْيَةٍ أَوْ مَتَاعٍ زَبَدٌ مِّثْلُهُ كَذَلِكَ يَضْرِبُ اللّهُ الْحَقَّ وَالْبَاطِلَ فَأَمَّا الزَّبَدُ فَيَذْهَبُ جُفَاء وَأَمَّا مَا يَنفَعُ النَّاسَ فَيَمْكُثُ فِي الأَرْضِ كَذَلِكَ يَضْرِبُ اللّهُ الأَمْثَالَ
﴿١٧﴾
Julio Cortes
Ha hecho bajar del cielo agua, que se desliza por los valles, según la capacidad de éstos. El torrente arrastra una espuma flotante, semejante a la escoria que se produce en la fundición para fabricar joyas o utensilios. Así habla Alá en símil de la Verdad y de lo falso: la espuma se pierde; en cambio, queda en la tierra lo útil a los hombres. Así propone Alá los símiles.
Raúl González Bórnez
«Él hace descender de los cielos agua que fluye por los valles según la capacidad que poseen y la corriente lleva espuma flotando; semejante a la espuma que sale de lo que se pone sobre el fuego para fabricar adornos o instrumentos.» Así compara Dios la Verdad con la falsedad. La espuma desaparece, pero lo que es beneficioso para la gente permanece en la Tierra. Así es como pone Dios los ejemplos.
Muhammad Isa García
[Dios] envía el agua del cielo, que corre por los valles acorde a la capacidad de los mismos, y en su torrente acarrea espuma en su superficie, igual que la espuma que sale de la fundición para fabricar las alhajas o los utensilios. Con ello Dios les expone un ejemplo para que sepan diferenciar la verdad de lo falso: en cuanto a la espuma, se desvanece rápidamente, y aquello que beneficia a la gente permanece en la tierra [enriqueciéndola]; así es como Dios les expone los ejemplos.