فَإِذَا مَسَّ الْإِنسَانَ ضُرٌّ دَعَانَا ثُمَّ إِذَا خَوَّلْنَاهُ نِعْمَةً مِّنَّا قَالَ إِنَّمَا أُوتِيتُهُ عَلَى عِلْمٍ بَلْ هِيَ فِتْنَةٌ وَلَكِنَّ أَكْثَرَهُمْ لَا يَعْلَمُونَ
﴿٤٩﴾
Julio Cortes
Cuando el hombre sufre una desgracia, Nos invoca. Luego, cuando le dispensamos una gracia Nuestra, dice: «¡Lo que se me ha dado lo debo sólo a ciencia!» ¡No! Es una prueba, pero la mayoría no saben.
Raúl González Bórnez
Y, cuando al ser humano le toca un mal, Nos invoca suplicante. Pero cuando hacemos que le llegue un beneficio que procede de Nosotros, dice: «En verdad, lo he obtenido gracias a mi inteligencia.» Pero, en realidad, es una prueba, aunque la mayoría de ellos no saben.
Muhammad Isa García
Cuando al ser humano le sucede una desgracia Me invoca; y luego, cuando le concedo una gracia, dice: "La gracia que se me ha concedido es porque me lo merecía debido a mi capacidad". Esto es una prueba [de Dios], pero la mayoría lo ignora.