وَإِذَا جَاءهُمْ أَمْرٌ مِّنَ الأَمْنِ أَوِ الْخَوْفِ أَذَاعُواْ بِهِ وَلَوْ رَدُّوهُ إِلَى الرَّسُولِ وَإِلَى أُوْلِي الأَمْرِ مِنْهُمْ لَعَلِمَهُ الَّذِينَ يَسْتَنبِطُونَهُ مِنْهُمْ وَلَوْلاَ فَضْلُ اللّهِ عَلَيْكُمْ وَرَحْمَتُهُ لاَتَّبَعْتُمُ الشَّيْطَانَ إِلاَّ قَلِيلاً
﴿٨٣﴾
Julio Cortes
Cuando se enteran de algo referente a la seguridad o al temor, lo difunden. Si lo hubieran referido al Enviado y a quienes de ellos tienen autoridad, los que deseaban averiguar la verdad habrían sabido si dar crédito o no. Si no llega a ser por el favor que de Alá habéis recibido y por Su misericordia, habríais seguido casi todos al Demonio.
Raúl González Bórnez
Y, cuando llega a ellos un asunto del que sentirse seguros o del que temer, lo difunden [sin verificarlo], pero si lo hubiesen remitido al Mensajero y a los que tienen autoridad entre ellos, aquellos que deseaban saber la verdad de primera mano la habrían sabido. Y si no fuese por el favor de Dios sobre vosotros y por Su misericordia, habríais seguido a Satanás, exceptuando a unos pocos.
Muhammad Isa García
Cuando escuchan un rumor que pudiere atentar contra la seguridad y sembrar el temor, lo divulgan inmediatamente. Pero lo que debían hacer era remitirlo al Mensajero y a quienes tienen autoridad y conocimiento, que son quienes pueden investigar la información y comprender su magnitud, y sabrían qué hacer. Si no fuera por el favor y la misericordia de Dios para con ustedes, habrían seguido la voluntad del demonio, salvo algunos pocos.