حَتَّى إِذَا جَاء أَمْرُنَا وَفَارَ التَّنُّورُ قُلْنَا احْمِلْ فِيهَا مِن كُلٍّ زَوْجَيْنِ اثْنَيْنِ وَأَهْلَكَ إِلاَّ مَن سَبَقَ عَلَيْهِ الْقَوْلُ وَمَنْ آمَنَ وَمَا آمَنَ مَعَهُ إِلاَّ قَلِيلٌ
﴿٤٠﴾
Julio Cortes
Hasta que, cuando vino Nuestra orden y el horno hirvió, dijimos: «Carga en ella a una pareja de cada especie, a tu familia -salvo a aquél cuya suerte ha sido ya echada- y a los creyentes»,. Pero no eran sino pocos los que con él creían.
Raúl González Bórnez
Hasta que, cuando llegó Nuestra orden y el horno comenzó a hervir, le dijimos: «Carga en ella dos de cada especie, a tu familia, excepto quien fue sentenciado previamente, y a los que creyeron.» Y no habían creído con él excepto unos pocos.
Muhammad Isa García
Cuando llegó el momento de cumplirse Mi orden [del diluvio], el agua comenzó a fluir y correr impetuosamente por el suelo, [entonces] le dije [a Noé]: "Embarca una pareja de cada especie [de la fauna doméstica de la zona], así como a tu familia, excepto aquél sobre quien pese la sentencia, y [por supuesto] a los creyentes". No obstante, los que habían creído en él eran muy pocos.