وَلَئِنْ أَذَقْنَاهُ نَعْمَاء بَعْدَ ضَرَّاء مَسَّتْهُ لَيَقُولَنَّ ذَهَبَ السَّيِّئَاتُ عَنِّي إِنَّهُ لَفَرِحٌ فَخُورٌ
﴿١٠﴾
Julio Cortes
Si le hacemos gustar una dicha., luego de haber sufrido una desdicha, seguro que dice: «¡Se han alejado de mí los males!» Sí, se regocija, se ufana.
Raúl González Bórnez
Y, si le hacemos disfrutar de una merced después de haber sufrido una dificultad, con seguridad dirá: «Se han ido de mí los males.» y se llenará de alegría y orgullo.
Muhammad Isa García
Pero cuando le agracio luego de haber padecido una adversidad, dice: "Se han alejado los males de mí", se regocija con arrogancia.