وَلَئِنْ أَذَقْنَاهُ رَحْمَةً مِّنَّا مِن بَعْدِ ضَرَّاء مَسَّتْهُ لَيَقُولَنَّ هَذَا لِي وَمَا أَظُنُّ السَّاعَةَ قَائِمَةً وَلَئِن رُّجِعْتُ إِلَى رَبِّي إِنَّ لِي عِندَهُ لَلْحُسْنَى فَلَنُنَبِّئَنَّ الَّذِينَ كَفَرُوا بِمَا عَمِلُوا وَلَنُذِيقَنَّهُم مِّنْ عَذَابٍ غَلِيظٍ
﴿٥٠﴾
Julio Cortes
Si le hacemos gustar una misericordia venida de Nosotros, luego de haber sufrido una desgracia, dirá de seguro: «Esto es algo que se me debe. Y no creo que ocurra la Hora. Pero, si se me devolviera a mi Señor, tendría junto a Él lo mejor». Ya informaremos a los infieles, sí, de lo que hacían y les haremos gustar, sí, un duro castigo.
Raúl González Bórnez
Y cuando, después de haber sufrido una contrariedad, le hacemos probar una misericordia proveniente de Nosotros, dice: «Esto es mío y no creo que llegue la Hora. Y en caso de que se me hiciese regresar a mi Señor sólo bien obtendría de Él.» En verdad, informaremos a los que no creían de lo que hacían y les haremos probar un castigo contundente.
Muhammad Isa García
Si lo agracio con Mi misericordia después de que sufriera una desgracia, dice: "Esto es lo que me merecía, y no creo que la Hora del Juicio llegue jamás; pero si compareciera ante mi Señor, seguro que Él me concedería lo más bello que existe". Pero ya les informaré a los que se negaron a creer todo lo que hicieron, y los haré sufrir un castigo terrible.