قُلْ إِنَّمَا حَرَّمَ رَبِّيَ الْفَوَاحِشَ مَا ظَهَرَ مِنْهَا وَمَا بَطَنَ وَالإِثْمَ وَالْبَغْيَ بِغَيْرِ الْحَقِّ وَأَن تُشْرِكُواْ بِاللّهِ مَا لَمْ يُنَزِّلْ بِهِ سُلْطَانًا وَأَن تَقُولُواْ عَلَى اللّهِ مَا لاَ تَعْلَمُونَ
﴿٣٣﴾
Julio Cortes
Di: «Mi Señor prohíbe sólo las deshonestidades, tanto las públicas como las ocultas, el pecado, la opresión injusta, que asociéis a Alá algo a lo que Él no ha conferido autoridad y que digáis contra Alá lo que no sabéis».
Raúl González Bórnez
Di: «En verdad, mi Señor solamente ha prohibido la indecencia y los malos comportamientos públicos o privados, el pecado, la agresión sin derecho, que adoréis como si fuera Dios aquello a lo que Él no ha concedido ninguna autoridad y poder y que atribuyáis a Dios lo que no sabéis.»
Muhammad Isa García
Diles: "Lo que realmente ha prohibido mi Señor son las obscenidades, tanto en público como en privado, la maldad, la opresión sin causa, que Le asocien en la adoración y que afirmen acerca de Él lo que ignoran".