قَالُواْ يَا لُوطُ إِنَّا رُسُلُ رَبِّكَ لَن يَصِلُواْ إِلَيْكَ فَأَسْرِ بِأَهْلِكَ بِقِطْعٍ مِّنَ اللَّيْلِ وَلاَ يَلْتَفِتْ مِنكُمْ أَحَدٌ إِلاَّ امْرَأَتَكَ إِنَّهُ مُصِيبُهَا مَا أَصَابَهُمْ إِنَّ مَوْعِدَهُمُ الصُّبْحُ أَلَيْسَ الصُّبْحُ بِقَرِيبٍ
﴿٨١﴾
Julio Cortes
Dijeron: «¡Lot! ¡Somos los enviados de tu Señor! ¡No se llegarán a ti! ¡Ponte en camino con tu familia durante la noche y que ninguno de vosotros se vuelva! Tu mujer, sí que se volverá y le alcanzará el mismo castigo que a ellos. Esto les ocurrirá al alba. ¿No está cercana el alba?»
Raúl González Bórnez
(Los ángeles) dijeron: «¡Oh, Lot! ¡Verdaderamente, somos enviados de tu Señor! ¡Ellos no podrán llegar a ti!» «Parte en secreto con tu familia en un momento de la noche y que nadie de vosotros se dé la vuelta.» «Exceptuando a tu esposa, que sufrirá la misma suerte que ellos.» «En verdad, la cita es al amanecer. ¿Acaso el amanecer no está cercano?»
Muhammad Isa García
Dijeron [los ángeles]: "¡Oh, Lot! Somos emisarios de tu Señor, y sabe que no podrán hacerte ningún daño. Márchate con tu familia durante la noche, y que ninguno de ustedes vuelva la mirada atrás, excepto tu esposa que sufrirá el mismo castigo que ellos. Su destrucción será al alba, ¿acaso el alba no está cerca?"